Ankara

Desde la estacion de autobuses tuve a un chico que me decia que el me acompañaba hasta el hotel, que queria aprender Español pero no tenia ni idea y nos comunicabamos por simbolos. Una vez llegamos al hotel me despedi de el amablemente y me dispuse a buscar un sitio donde cenar algo. Recibi un mensaje de una chica que habia conocido en una de las noches de verano orquesteras y tuve la oportunidad de conocer tanto a ella como a gente de la organizacion en la que hacia el voluntariado. Esa noche fuimos a un bar que me recordo a un baile de instituto de los años 50 en EE.UU y acabamos bailando algunas canciones de rumba y la macarena.

Mi segundo dia en ancara lo podeis leer en la entrada de la vida en bolas Tesekkur ederim